
El consumidor actual valora el espectaculo, la imediatez, la novedad... si algo no sirve para este fin no le interesa. Cuando se compra algo nuevo se quiere impresionar y , a dia de hoy. entre mi nuevo ordenador tiene tropecientos gigas o mi nuevo ordenador tiene una calidad de construccion superior el consumidor elige lo primero. Y el fabricante (ya ni estoy seguro de poder usar este calificativo) pone todos sus recursos para satisfacer esta caracteristica en detrimento de lo demas.
Como efecto secundario de esto me parece que la obsolescencia programada ha quedado obsoleta
